martes, 6 de octubre de 2015

Nuestra sombra


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Cuando veo cómo disfrutan los turistas de la ciudad en la que vivo compruebo lo cerca que estoy de una de las maravillas del mundo, y del privilegio accesible de la vida de encontrarme rodeado de obras de arte y de lugares que muestran la indeleble marca de las culturas que se asentaron aquí durante un tiempo. En una ciudad como esta tiene tanta fuerza la impronta de los siglos pasados que acabamos por no considerar lo pretérito, como si pertenecieran a nuestros días todos esos giros artísticos de profunda expresividad, como si el sentido de que se encuentren ahí no fuese otro que el de rodear todo aquello que tanto trabajo costó construir de edificaciones modernas que sobresalen a veces con la intensidad de lo postizo, ni siquiera de una aproximada y actual adaptación al entorno haciendo uso de las herramientas y los avances de los que hoy en día disponemos. A menudo se nos pasa por alto la importancia de lo que a diario tenemos delante de los ojos. Nos suele atraer aquello de lo que andamos lejos, por eso a los que somos del sur nos llama la atención el norte y viceversa. Si se para uno a pensarlo la fortuna de ver el brillo de las calles recién regadas al inicio de la madrugada mientras pasea por el casco antiguo de Sevilla, cuando todo se encuentra en un aparente perpetuo estado de calma que incita a las reflexiones de este tipo, basta para con solo abrir un poco la mente empezar a viajar de la misma manera que lo hace cuando lee un libro. Con mucha frecuencia alabamos la belleza de este o de aquel monumento, de la ciudad entera, de alguno de sus barrios pero, con más asiduidad de la aconsejable para que uno se sienta con los pies sobre este sitio, desconocemos el por qué las cosas están donde se encuentran y lo que nos quieren decir. El simbolismo de las fachadas de otras épocas, los detalles que abastecen de un significado al pasado, se ha ido transformando con el paso del tiempo, y de él nos queda la riqueza a partir de la cual todo ha ido cambiando. La pena es que a pesar de parecer bastantes son mínimas en comparación con lo destruido las muestras de lo que fue. Pero esto siempre ha sido así, las más hermosas ciudades romanas de las inmediaciones de Sevilla fueron desbastadas y saqueadas en su día hasta la saciedad para tapar uno de los ramales del Río Grande, Guadalquivir, a su paso por la actual avenida de la Constitución, calle Sierpes, Trajano, Amor de Dios y la Alameda de Hércules. Siempre ese afán por intentar no dejar rastro de lo anterior, por anteponer la preponderancia de lo que ahora es, por tratar de aniquilar a nuestros antecesores como si se tratara de un mal virus todo aquello que hicieron. Resulta incontestable el ejemplo de la catedral de Córdoba, asentada en mitad de una mezquita que deslumbra a todo aquel que posa sus ojos en la perfección de la geometría de sus arcos y en la onírica distribución del plantel de sus interiores. Y por si fuera poco, ahora nos quitan de en medio la asignatura de filosofía, no sé si arrinconandola en el desván al que van a parar las denominadas materias optativas, cuando se trata ni más ni menos que de la base del conocimiento de cómo se ha ido transformando el mundo a partir de las reflexiones del hombre sobre la tierra, siendo el punto de partida de la disertación intelectual del individuo. A este paso en breve nos convencerán de que sería conveniente olvidarnos de nuestra sombra, aunque de momento a mi me place ver la mía en mis paseos por Sevilla.   

4 comentarios:

  1. Quitan,ponen,cortan,pegan...La educación a la carta de las necesidades de tal o cual país.Nos queda el libre pensamiento aunque con el bombardeo de la nueva tecnología poco dejan a la imaginación.Tiene que ser preciosa Sevilla...
    Un abrazo filosófico!!

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    1. Sevilla es uno de los placeres accesibles de la vida, un lujo para quienes se dan cuenta de que viven aquí. Y de la educación, pues ya ves; a este paso no nos vamos a acordar ni de quién era Cervantes.

      Mil abrazos

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  2. He estado dos veces en Sevilla. No sé si habrá una tercera.

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